Es
un sinsentido que el PSOE, un partido del establishment, se alíe con
Podemos, que proclama destruir el sistema político español. Los socialistas
dicen hacerlo por razones “ideológicas”, pues perderían el voto de “la
izquierda” si se alían con el PP, la derecha. Realpolitik es que los
integrantes de un sistema de partidos hagan bloque en momentos de crisis, pero
he ahí que “la ideología”, esa fe política decimonónica, hace que el PSOE apoye
el ingreso de Podemos en varias alcaldías, como Madrid. No les ha bastado
evidenciar que los cómplices y financistas de Podemos, en América Latina, han
hecho exactamente esa treta: entrar por la legalidad y luego destruir el
sistema. En general, un error corrige la acción concreta, pero no sucede lo
mismo con el pensamiento, que se autojustifica y reitera el error. Asociar a “la
izquierda” con el comunismo es un pensamiento falso. El comunismo es un refrito
absolutista de sectores plebeyos, mayormente lumpen. Fue un triunfo de la
manipulación soviética insertar la división entre “la izquierda” (comunistas) y
derecha (liberales), y fue una derrota del campo democrático, porque los
liberales hacen la revolución popular por los derechos humanos e individuales y
por la ciudadanía, mientras los comunistas la secuestran y destruyen.
Es
cierto que girondinos se sentaban a la derecha de la asamblea, en la Revolución
francesa, y jacobinos a la izquierda, pero pertenecían al mismo proceso. En
cambio, comunistas y demócratas son de dos modelos diferentes. Si el PSOE se
alía con los chavistas de Podemos imaginando que son lo mismo las izquierdas
democráticas que la chavista, merecen un suicidio político. Las consecuencias
las pagará el pueblo.
Por Juan Claudio Lechin Weise